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¿Cuál es la habilidad más poderosa del liderazgo?

Conoce la habilidad más poderosa del liderazgo, según el Foro Económico Mundial.

Si algo es cierto es que las personas no nos compran sólo nuestros productos y servicios, sino también a nosotros mismos.


Alguna vez en una de mis conferencias me preguntaron ¿cómo reconocer a un líder ejemplar? Yo respondí: es aquel que tiene congruencia en la dirección, sentido y propósito de su propia labor, lo que lo lleva a ser “ejemplo vivo” de lo que predica.


Pocas personas entran de forma verdadera en esta descripción, pero puedo decir, sin temor a equivocarme, que Víctor Capetillo es una de ellas.


Este joven capacitador, de 34 años, autor del libro Liderazgo implacable (Ed. Porrúa), está cambiando la forma y el fondo de actuar de los empresarios y los ejecutivos de las organizaciones, mostrando de manera clara y contundente una de las habilidades más poderosas del liderazgo: el carisma.


Con su metodología “Carisma implacable”, Víctor entrena a personas enseñando de manera vivencial los ejercicios para controlar los 3 comportamientos carismáticos que potencian para todo líder la maravillosa habilidad de “caer bien”.


Y esos 3 comportamientos de los grandes líderes marcan la diferencia en sus resultados con terceros:


1. Presencia. Si bien es cierto que la vestimenta es importante, aquí no sólo me refiero a ésta –aclara Víctor–. Estoy hablando de verdaderamente estar presente con los demás.

Para ello, Víctor nos presenta estas preguntas de reflexión para el lector:

  • ¿Cuántas veces estás en un espacio con una persona sin estar realmente con ella?

  • ¿Qué tanto te interesas en lo que la otra persona dice?

  • ¿Cómo garantizas que la persona que está frente a ti siente tu presencia?

Establecer ejercicios te hará generar una diferencia reconociendo lo que es verdaderamente importante.


2. Poder. En este aspecto, Víctor nos brinda tres preguntas de reflexión:

  • ¿Cómo ejercemos nuestra autoridad, desde una perspectiva incluyente?

  • ¿Cómo podemos hacer ver nuestro poder y autoridad definiendo nuestra seguridad personal sin llegar al autoritarismo?

  • ¿Cómo ese poder se convierte en mecanismo para que las personas deseen lo que tenemos para ofrecerles?

3. Calidez. Para ello nos lanza tres preguntas:

  • ¿Qué hace sentir a las personas la posibilidad de sentirse seguras con alguien?

  • ¿Cómo el acercarnos verdaderamente nos hace conseguir resultados favorables con las personas?

  • ¿Qué de nuestra forma de ser se relaciona con este comportamiento?

“Si algo lleva a las personas a acercarse unas a otras –destaca– es la parte humana. Los 3 comportamientos esenciales se centran en rescatar estas claves que ejercen los líderes. Utilizar los tres de forma modulada resulta clave para ejercer el liderazgo en todos los ámbitos, con la finalidad de hacer la diferencia y conseguir los resultados deseados.”


“Si algo lleva a las personas a acercarse unas a otras –destaca– es la parte humana. Los 3 comportamientos esenciales se centran en rescatar estas claves que ejercen los líderes. Utilizar los tres de forma modulada resulta clave para ejercer el liderazgo en todos los ámbitos, con la finalidad de hacer la diferencia y conseguir los resultados deseados.”


Víctor Capetillo es un veracruzano graduado en administración y con maestría en recursos humanos. Desde muy joven entró al mundo corporativo, pasando, entre otras empresas, por Toyota y Micronegocios Azteca de Grupo Salinas. Y al respecto nos cuenta cómo mediante habilidades transferibles logró impactar positivamente en la segunda.


Reconoce que si algo ha marcado su pensamiento en términos de liderazgo y desarrollo del carisma fue vivir el Toyota Production System y el manejo de las 5 S en las células Kaisen de esta empresa, que hacen que cualquier miembro de la organización impacte en los procesos, generando mejora continua real. Asegura que esto detonó en él la forma de escuchar, aprender y “desaprender” con otros:


“El primer día que arranqué mi entrenamiento por parte de la planta Toyota, mi consultor me dijo una frase que jamás olvidaré: ‘Víctor, a partir de hoy NO SABES NADA.’ En ese momento me quedé un poco en shock. Sin embargo entendí que una de las habilidades más importantes para nuestro desarrollo personal y empresarial es la habilidad de DESAPRENDER, comprendida como la hermosa capacidad de limpiar nuestra mente para recibir nuevo aprendizaje sin emitir juicios y permitirnos integrar esa información para extraer lo mejor de lo mejor en aprendizaje.”


Describe que a partir de ese momento inició un camino de crecimiento acelerado, que ha sido su filosofía de vida y aprendizaje, y que lo llevó a crecer en Micronegocios Azteca, donde llegó a liderar simultáneamente hasta 800 personas, pasando por 15 estados de la República Mexicana y haciendo que 125 empleados de la organización crecieran y ocuparan otros puestos. Todo ello utilizando –en la forma de relacionarse con ellos– aspectos y formas aprendidas en Toyota.


—¿En qué consisten las 5 S de la metodología Toyota que han marcado tu forma de concebir el liderazgo incluyente?


—Mira, en Toyota se trabaja por células Kaisen, donde se establecen juntas efectivas y eficaces de 15 a 20 minutos para eficientar procesos. Cualquier persona puede aplicar las 5 S: Seiri, Seiton, Seiso, Seiketsu y Shitsuke.


Toyota Production System permite que TODOS, absolutamente TODOS los miembros de la organización tengan la facultad de mejorar un proceso, cuestión que ha llevado a Toyota a tener tanto éxito.


Pero, ¿qué labor realizaba que le hizo generar parte de su visión? Capacitar a la gente en las células Kaisen y las 5 S permitiéndoles influir en el propio proceso en que trabajaban.


Las 5 S de la filosofía Toyota


Seiri (separando innecesarios): En español se comprendería como clasificar. La idea básica es quitar aquello que resulta inútil.


Seiton (situar necesarios): En español se comprendería como generar orden. La idea básica es organizar el lugar de trabajo y el trabajo mismo de forma eficaz.


Seiso (suprimir suciedad): En español sería limpiar, tanto el espacio físico como la forma y el fondo de las cosas.


Seiketsu (señalar anomalías): En español sería estandarizar. Previniendo la aparición de suciedad y el desorden (física y laboralmente), a las personas en Toyota se les enseña una estructura de señalización comprendida por colores, lo que permite saber en qué parte del proceso se está: si alguien acabó su labor, si alguien está por iniciarla o si está en proceso (la está haciendo) se debe marcar con un color. Esta señalización hace que una persona que no sabe qué está pasando pueda enterarse tras ver las señaléticas.


Shitsuke (seguir mejorando): En español sería mantener la disciplina, comprendida como el hábito constante de mejorar, enfocando los esfuerzos en este sentido.

Capetillo dice que las 5 S definieron su forma de comprender la integración de un equipo de trabajo, el desempeño del mismo y la oportunidad de vivir de manera real un liderazgo incluyente, porque eso les permite “manejar las normas y mejorarlas. No están sujetas a la ley absoluta de uno, sino que ejercen el poder de todos, y ésa es una gran manera de unificar su liderazgo, accediendo a la oportunidad de definir y mejorar su propio trabajo”.


Asegura que el simple hecho de que todos tengan la oportunidad de pulir los procesos y transformar la organización es lo que cambió su forma de relacionarse con la gente.


Esto le hizo aprender a escuchar y cambiar sus comportamientos, influyéndolo completamente en la forma de concebir el liderazgo permitiendo que otros sumaran a los equipos su fuerza desarrollando un liderazgo incluyente.


Consejos de Víctor Capetillo


Al ser experto en capacitación de liderazgo empresarial y organizacional, le pedí que nos regalara 3 consejos para directivos y 3 para empresarios:


Para directivos:


1. Las personas no harán lo que les digas, sino lo que te vean hacer. Asegúrate de que la CONGRUENCIA forme parte de tu estilo de vida, y con ello lograrás que tu equipo confíe en ti.


2. No hay un solo motivador para todas las personas. Cada persona hace las cosas por sus propias razones. Asegúrate de conocer a tu equipo, y saber qué es lo que motiva a cada uno. Así encontrarás el puente entre lo que ellos quieren y lo que el equipo necesita.


3. Visión. Te recomiendo un par de ejercicios para incrementar tu nivel de influencia: a) Pregúntate hacia dónde te diriges en tu vida y tu trabajo. Y una vez que lo tengas claro, b) Pregúntate hacia dónde vas a llevar a tu equipo. Esta claridad te dará mayor certeza y seguridad en la comunicación de tu equipo a un nivel profundo, de manera tal que ellos percibirán que tú eres la persona adecuada para liderarlos, lo que sin duda facilitará un mejor rendimiento.


Para empresarios:


1. Prioriza tener una Organización que Aprende: Si las mejores ideas vienen siempre de los directivos, entonces no estamos aprovechando todo el talento que tenemos en la organización.


2. Visualiza ¿cómo sería tu empresa si tú no existieras y qué legado estás dejando? ¿Qué te gustaría que se dijera de ti? ¿Cuántas vidas estás impactando positivamente con tu empresa actualmente? Y ¿por qué tu empresa debería superar los retos generacionales que se le presentan? Al final, ¿cuál es la aportación de tu empresa?


3. Balancea empresa-familia. Comprende que si el motor que nos mueve a prosperar es la familia, así sea como empleados o empresarios, ésta debe tener cubiertas sus necesidades humanas. Analiza si lo estás logrando, ya que tu empresa es el sustento de muchas familias, empezando por la tuya. Proyectar un balance que te ayude a comprender esto, y cubrir esas necesidades básicas de los miembros de tu organización, te hará crecer y contribuir a nivel social. Con ello no sólo ganarás el reconocimiento por parte de ellos, sino algo todavía más importante: su lealtad.


Esta forma de ver de Víctor Capetillo nos marca como clave que para generar un liderazgo verdadero se deben reconocer las fortalezas de los demás, lo que hace incluirlas en la toma de decisiones clave de las organizaciones.


Permitir este acercamiento de forma real definió en la vida del mismo Capetillo el encontrar mayor significado en los comportamientos carismáticos, actuar como un auténtico líder ejerciendo la presencia, la autoridad real (sin autoritarismos) y la calidez de forma habitual.


Los nuevos agentes del cambio social, empresarial y organizacional en el siglo XXI son los jóvenes, quienes aprendiendo cada vez más de distintas culturas podemos sumar lo mejor de ellas para hacer efectivo nuestro liderazgo y el de los demás.


Para finalizar quiero compartirte una gran frase de Víctor Capetillo que creo define en gran medida su visión: “Nacimos para servir, vivimos para trascender.”


Escrito por

En colaboración con Forbes México.

Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no del Foro Económico Mundial.

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